Si hace pocos días estrenábamos 50 sobras de Grey en la gran pantalla tras haber pasado por los libros y muchos dedos ahora nos preguntamos qué pasa con ese stock de juguetes eróticos que no llegan a las tiendas porque miles de amas y otras tantas sumisas han decidido sacar de las letras su lado más lascivo.
¿Qué ocurriría si te gastas toda la pasta en comprar los juguetes de la saga? Pues seguramente que no llegues a fin de mes como es normal pero esto tiene cierta solución.
Hasta ahora hemos hablado de imprimir circuitos, coches y hasta prótesis. Algunas empresas ya te duplican la casa...pero ¿y si lo tuyo es más del vicio "Grey"?
Pues sencillamente lo que tendrás que hacer es conseguirte una impresora 3D y bajarte los modelos de penes que quieras para tener tantos juguetes como te de la gana. Hay empresas en internet, como MARKELOVE, que regalan los patrones...otra cosa será que quieras uno en concreto (me veo a Nacho Vidal vendiendo un "recortable" de su miembro JAJAJA)
¿No será muy caro? Pues todo depende de si te conformas con un zapato que calce a tu medida o por el contrario prefieres tener que aprieten, anchos de horma o unas playeras.
En definitivas cuentas...nos podemos imprimir todo el sexo que queramos.
¿Te parece un coñazo?
Pues que no te parezca porque un coñazo y LITERAL es la réplica que se hizo la artista japonesa, Megumi Igarashi, de su vulva para poder navegar en ella tipo canoa.
Sí, como lo has oído, se replicó el chocho a lo grande para poder surcar ríos a placer y lo que se ha encontrado es con la poca permisividad del país más permisivo que existe en esto del sexo.
Paradójicamente hablando, su delito está en la transmisión de datos desde dónde le sale hasta la impresora.
Pues nada...así es amigos. En una de estas nos compramos una impresora 3D y decimos adiós desde la tienda del chino a todo aquello que se nos ocurra...con tal de satisfacer nuestros deseos.
0 comentarios:
Publicar un comentario